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El fotógrafo Jack Long, utiliza mezclada con espesantes, pigmentos y colorantes suspendidos en el aire durante una fracción de segundo y, con una automática con flash, capta el momento justo en donde los coloridos ingredientes danzan con el aire y la luz.
No hay photoshop, ni ha habido ningún tipo de truco informático. Tan solo la imaginación del artista, la destreza y magia, mucha magia.
Porque en realidad no son flores, por mucho que te lo pudiera parecer... en verdad son flores de agua. Todo esto ha sido hecho simplemente con salpicaduras de agua coloreada. Es decir, gotas de agua que al salpicar acaban adquiriendo esas formas singulares. Y si abstraes la mente un poco, te darás cuenta de que es así realmente... mágico, sin duda.
El
artista es Jack Long, y las imágenes han sido tomadas con una sola exposición.
Durante el otoño de 2011 creó el vaso de líquido, mientras las formas florales y
las hojas las hizo en el invierno. En la primavera de 2012 juntó todo... y este
es el maravilloso resultado.
Fuente: diyphotography.net
Delia, es maravilloso el arte que plasma el fotográfo en sus inventivas fotografías. Es ARTE puro, sin artificios. Maravilloso. Muchas gracias por compartir. Un abrazo desde el corazón de España.
ResponderEliminar¿Viste qué genial? Me encantó a mí también.
ResponderEliminarTe abrazo con toda mi ternura, Lola.